sábado, 22 de septiembre de 2018

Ejemplares nini (3 y último)


Elsa

Hola. ¿De verdad no te agarro muy ocupado?... Todo bien, Toño, gracias. ¿Ustedes qué tal?... Qué bueno… Sí, claro, lo principal… Oye, pues para no quitarte demasiado tiempo, déjame ir directamente al grano… Me apena mucho, pero te hablo para pedirte un gran favor, enorme… Lo sé, Toño, qué lindo, gracias, y de verdad que por eso me atrevo… Pues se trata de Elsa… No, ella está bien de salud, todo bien, el asunto es otro. Como tal vez recuerdes, ella terminó su carrera hace algún tiempo, ¡y bien, eh!, con excelentes calificaciones, titulada con mención honorífica… No, ella estudió algo semejante, parecido, pero su licenciatura tiene otro nombre, como que trataron de darle un enfoque más novedoso, más tecnológico… Elsa es licenciada en Producción Digital… Sí, salió de una universidad particular, pequeña… Ajá… Bueno, terminó hace dos años y medio, y se tituló luego luego… No, no tesis, hacen una especie de seminario de titulación… Claro, con un costo… Total que salió de la escuela y de inmediato encontró chamba con dos amigos, egresados de la misma escuelita, que montaron un despacho de producción de comerciales, y ganando muy bien, eh… El negocio iba viento en popa, o eso parecía, sus oficinas muy bien montadas, todo nuevo, bonito; trabajaron durante unos seis meses; según entiendo consiguieron algunos contratos, pero pues al parecer no fueron habilidosos en la parte de la administración... Bueno, como haya sido, tronó el despacho, quebraron y según entiendo hasta salieron debiéndole a uno de los inversionistas, uno de los papás de los muchachos… Bueno, pero no me desvío. Elsa se quedó sin trabajo, y pues empezó a buscar y buscar y buscar… Me consta que al principio la pobre le puso mucho empeño, mucho ahínco: se levantaba temprano, organizaba su día, buscaba opciones, agendaba citas, mandaba currículums, hablaba aquí y allá, pero nada… De pronto, muy de vez en cuando, le hablaban para ofrecerle algo, pero siempre o muy mal pagado o cosas que de plano nada tenían que ver con su carrera. Un día me dijo, como no creyéndolo: “Mamá, es el colmo: me ofrecieron un puesto de vendedora en mostrador”. Pasó un mes y después otro y tres meses y seis, y cuando nos dimos cuenta Elsa ya llevaba más de un año sin trabajar y sin estudiar y sin hacer nada… Pues, nada, Toño, nada lo que se dice nada: pasarse todo el día encerrada en su cuarto maldiciendo la vida. Ya ni siquiera busca chamba, está poniéndose cada día más agria, más frustrada la pobre… Sí, tienes razón: es un círculo vicioso, y por eso te llamo, para que me ayudes a sacarla de allí… No, no es trabajo en tu negocio…, bueno sí, trabajo, pero se me ocurrió algo, una idea extremosa, de locos si tú quieres, pero la situación no está para menos. Se me ocurrió que la contrataras, vamos a decir… que la contrataras, para que te haga algo relacionado con su carrera, no sé, por ejemplo el sitio en Internet de… Bueno, no que lo haga, que revise el que ya tienes y que te proponga…, no sé, mejoras… Pero, espera, la idea es que a ti no te cueste nada, ni un peso… Sí, mira, Toño, la idea sería que yo pusiera el dinero de su sueldo, pero, claro, sin que Elsa lo supiera nunca…


Tavito

Yo nunca estuve conforme con que sacáramos a Tavito del CCH. Yo le advertí a Susana: va a perder el pase automático, pero ya la conoces, siempre le pueden los pucheros de los hijos. ¡Que trate, Susa, la vida es de los que saben adaptarse! Pero no hubo manera de convencerla: que era inhumano dejarlo ahí, que estaba muy deprimido, que ya ni se peinaba, que ya no quería que lo llevara al CCH… Al final terminó sacándolo y lo pasamos a la prepa de escuela de paga en la que había hecho la secu. Y ahí se sintió a gusto y terminó la prepa… Tavito es muy inteligente, y por eso dice que se aburre en la escuela, pero, como sea, acabó. Dijo que quería estudiar Administración de Empresas, y pues a apoyarlo, porque siempre ha sido muy bueno en matemáticas. La primera vez que presentó el examen para la UNAM quedó a siglos de llegar a los puntos que necesitaba; no sabes, una sorpresa y una desilusión para todos… Susa dijo que no podía ser, que Tavito es muy inteligente, que de seguro hacen trampas cuando califican los exámenes para que nomás queden los recomendados, pero el mismo Tavo le dijo a su mamá que no, que había sentido muy difícil el examen, que venían un chorro de preguntas que ni al caso, que no tenían que ver con Administración o cosas que no le habían enseñado en la prepa… Se enojó tanto Susana por eso que hasta fue a reclamarles en la prepa: que de qué se trataba, que si el muchacho había salido con un promedio si no muy alto al menos suficiente para que le dieran su certificado de prepa, y resulta que era un timo, un fraude, porque al niño no lo habían preparado para pasar el examen de admisión… La directora nos explicó que el problema no era pasar, que incluso con los pocos puntos que había sacado Tavito, pues sí pasaba el examen, que el problema era quedar entre los de más alta calificación para alcanzar lugar, porque todo parte de eso: de que no hay lugar para todos… Susa no salió muy convencida pero, bueno, metimos a Tavito a un curso en un colegio muy prestigiado, un curso especial para pasar el examen de admisión…, bueno, para pegarle a los puntos que se necesitan… ¡Salió bien caro!, pero, bueno, ¡ni modo!, pedí un crédito de nómina porque, pues había que apoyar al hijo… Pues sí, Susa dice que le echó muchas ganas, que lo llevaba diario y bien, animado... No, de nuevo: no alcanzó los puntos necesarios. Así que ahora a ver qué hacemos: Susa quiere que lo metamos a una universidad que está aquí cerca de la casa, particular, que muy buena según le dijeron ahí mismo, aunque la verdad yo la veo medio patito, y la verdad ya no me alcanza… Susa dice que no lo quiere tener de nini en la casa, que ya no soporta verlo ahí metido sin hacer nada, que ya ni se peina el pobre… No sé, igual pido una ampliación del préstamo…; hay que apoyar al chavo…

No hay comentarios:

Publicar un comentario