Verdaderamente me siento vivo, vivísimo, cuando, por una razón u otra, tengo que hablar de la muerte…Sirva la cita nomás para recomendar la susodicha bitácora virtual: El cuaderno de Saramago.
Un blog apasionado, incondicional y sobre todo inútil sobre esos objetos planos, inanimados, caros, arcaicos, sin sonido estereofónico, sin efectos especiales, y sin embargo maravillosos llamados libros.
sábado, 22 de noviembre de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario